En un Mundial que entrega más sorpresas de lo habitual, tras la derrota ante Gales la semana pasada, Inglaterra perdió hoy ante Australia su segundo partido y quedó fuera de competencia.
Los de la Rosa tuvieron enfrente a un equipo que pasa por un momento excepcional y se constituye en uno de los principales candidatos a quedarse con la copa Webb Ellis. Los Wallabies supieron jugar con los nervios de los dirigidos por Stuart Lancaster, dominaron progresivamente el juego y estiraron la diferencia en el marcador ante la desesperación local en el último cuarto de hora de juego.
La actuación del apertura australiano, Bernard Foley, fue determinante para el triunfo. Marcó 28 puntos: dos tries, cuatro penales y tres conversiones. La otra gran fortaleza fue el scrum; la diferencia con el pack inglés fue ostensible. David Pocock y Michael Hooper también tuvieron una excelente actuación en la tercera línea Aussie.
Inglaterra, que a pesar de los nervios tuvo un buen inicio de juego, se sintió permanentemente en desventaja ante las variantes del conjunto oceánico. Ante la desesperanzada mirada de todos sus fanáticos en Twickenham, ensayó una recuperación en el segundo tiempo, acortó la distancia a siete puntos, pero nuevamente Australia impuso su jerarquía.
Un pack demoledor en el scrum, una defensa asfixiante y numerosas variantes en ataque le dieron al visitante las credenciales para cerrar el partido con 20 puntos de diferencia.
Para los ingleses, la frustración máxima de haber quedado fuera de competencia por el torneo en su propia casa. Le quedará un partido, de consuelo, ante Uruguay en Manchester. Por su parte, Australia y Gales se enfrentarán para ver quién se queda con el liderazgo del Grupo A.
Fuente: Tycsports
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